Es Mejor Ser Querido Que Necesitado

Escuché un gran concepto el otro día, que en las relaciones es mejor ser querido que necesitado.

La revelación completa, yo voy a la iglesia, creo en Dios y amo leer la Biblia. Este estado no tiene nada que ver con eso (para los que son anti todo eso, no se preocupen) pero el concepto actual del cual quiero hablarles viene de un sermón que oí pero que es universal y te abre los ojos. Verdad.

En el sermón, el pastor hablaba de cómo Dios no nos necesita, porque Él es Dios, ¡claro! Pero aún así Él nos escogió porque nos ama, y esencialmente nos quiere. Me quedé paralizada por ese pensamiento, porque me dio una nueva perspectiva en cómo yo veo las relaciones día con día. Y no me refiero a las relaciones con miembros de la familia, ya que hemos nacido en esa sangre y estamos conectados por relación. Estoy hablando de las relaciones que escogemos para ser parte de ellas. Tu pareja, esposo, esposa, novio, novia y por qué no hasta los compañeros de negocio.

Cuando miro atrás a mis relaciones anteriores, fueron muy destructivas, enfermizas y en muchas maneras abusivas. Recuerdo algo que mi ex me dijo al final de una larga y dolorosa discusión: “por favor no me dejes, te necesito”. No dudé por un segundo lo que él hizo, él aún no había enfrentado su propia identidad, ni cambiado sus patrones nada saludables en su vida. Su única manera de hacer las cosas era dependiendo de los que estaban a su alrededor (yo), mientras barría y escondía sus problemas debajo de la alfombra.

Estar en una relación donde necesitas y dependes de alguien siempre será un recipiente para desastre a lo largo de la carrera, llegas a un punto donde ya no funcionas sin ellos, ya no conoces la verdadera felicidad y cumplimiento sin tu pareja.

Estar en una relación se supone que es una experiencia enriquecedora, la creciente experiencia donde se aprende el desinterés de nuevas maneras y aprendes del amor de nuevas maneras.

Sé que es mejor ser querido que ser necesitado, me gustaría mucho ser escogido para estar con alguien porque complementa mi vida, en lugar de llenar un vacío que necesita ser sanado de alguna manera.

Al mismo tiempo debemos ser capaces de llegar a un punto en nuestras vidas en la que no necesitemos necesariamente una relación. Si necesitas una pareja que te ayude a pagar tus facturas, comprar comida, encontrar un trabajo, ser feliz, conocer amigos y estar sano, entonces en definitiva estás buscando algo equivocado. Sé que puede sonar muy fuerte, pero una relación no es un reparador mágico de las cosas en la vida.

Una relación no es algo fácil, y es solamente cuando tú estás en paz, plenitud, satisfacción y autosuficiencia que tú tienes la capacidad de iniciar una.

Me imagino que ya has escuchado decir que cuando alguien está completamente feliz y satisfecho en sus vidas es más probable que atraigan una pareja. Entonces yo sugiero que es cierto porque en el fondo nosotros como seres humanos somos genéticamente inteligentes, diseñados para tener compañía por razones de cortesía, y no por medidas desesperadas.

Los hombres y mujeres son diferentes por buenas razones, porque podemos complementarnos uno al otro ya sea en una relación de trabajo o personal.

Te reto ahora para que veas todas tus relaciones de una manera diferente. ¿Las personas que están en tu vida están porque las escogiste y las quieres para que enriquezcan y mejoren tu vida? ¿O porque tú no podrías funcionar sin ellos?

Sé que no todos estarán de acuerdo conmigo, y no juzgo a nadie por su situación, todo lo que quiero hacer es ofrecer una perspectiva diferente y espero poder iluminarte de alguna manera.

Viniendo de alguien que es el beneficiario de una relación elegida, honestamente puedo decir por primera vez en mi vida adulta que soy feliz, soy productiva, soy mejor amiga, puedo cuidar de mí misma y sé cómo hacer una mejor selección.

Asha Dahya